jueves, 24 de noviembre de 2011

NOSTALGIA NOCTURNA

En las horas sin fe y sin esperanza
y en los momentos de acallar el alma,
se confunden  jazmines y cometas.

Embriaguez  en mi cielo y mi refugio
vuelos nocturnos y aroma de jazmines.

Hay un raro misterio, las paredes
no reflejan la luz, solo  las sombras.

Sombras sobre sombras.

Al pensamiento lo azucaran los recuerdos
y es un suspiro, la lámpara que vela.

Las voces nocturnales se hacen música,
extraviada vuela una luciérnaga
y a través del cristal de la ventana
se perfila una noche de lánguida ternura.

Sobre sombras, camina la nostalgia.


                                                                   

miércoles, 23 de noviembre de 2011

AMANECER DE SUEÑOS



Amanece
y amanecí estrenando sueños.

Sonidos del tiempo se derraman
en arpegios celestes
y empieza a amanecer

La lluvia me acaricia
me habla quedo,
y trasparecías visitan mi ventana.

El sol, besa los tejados
y arrullos de palomas
cobijan mis aleros.

Primaveras y otoños me regalan
sus más suaves colores.

La piel, tibia y temblorosa
cual bambú
acariciado por el viento,
y tu mirada  en mis pupilas
es  un desierto en llamas.

Amanecer de sueños y de amores
en los sonidos del tiempo
y en los suaves colores de mi otoño




ANDARIEGA INCANSABLE

Como voz de un arpa  o de campana herida
 llegaron de la infancia los recuerdos.
Años y años esperando inquieta
la bella caravana de los sueños.

Un día viaje con los gitanos,
conocí la ciencia de las manos.
El secreto de cobres y de estaños,
y la fogosidad de los caminos.

Llene de fantasías mis espacios,
 tuve trenzas largas, mirada  misteriosa
y un collar de jade que me vestía toda,
cuando las castañuelas, abrazaban mis dedos
y danzaba embriagada entre siete colores.

Amé entonces a un gitano bello, locuaz y pendenciero,
idilio que duro lo  que dura un suspiro…

Más tarde amé los circos,  su música y sus luces,
los peligros del aire en trapecio de espuma,
 lentejuelas de oro y rasos del oriente
me colmaron de dicha, me llenaron de gozo.

Y amé, a un negro domador de fieras
jugador y vicioso, peligroso y fatal,
a quien no debí  amar.

Los colores colmaron mis ardientes anhelos,
fui maniquí volando, fui saeta entre cables
y un día cualquier día, fui juguete del viento
y como mariposa abandone el jardín.

Ahora estoy muy sola, cansada y sin alientos,
castañuelas y danzas enfebrecen la vida.
Los rasos del oriente, las lentejuelas oro
ensombrecen los días y fustigan las horas.
                                                                                                            
Vida de caminante, vida de los  gitanos.
Andariega incansable, danzarina embriagada
de los grandes aplausos, del delirio en el aire
y aquel collar de jade.

Vida que me llenaste de gozos y  alegrías,
ya todo me lo diste, ya no me espera   nada.











ANDARIEGA INCANSABLE








DESTINOS



En nuestros sueños,
anduvimos destrozando nidos
sin pensar que rompíamos
el corazón de los polluelos.

Estuvimos desgajando margaritas
sin recordar que matábamos
corazones en ensueño.

Prometimos amor,
amor eterno, sin pensar
que hacíamos sangrar
los corazones.

Sigamos desgajando margaritas,
destrozando nidos
y haciendo sangrar el corazón
en nuestro sueños,
porque ese fue nuestro destino.

DOMINGOS DE MAGNOLIAS



Es tarde de domingo somnoliento.
Magnolias embrujadas
danzando van delante de mis pasos.

Es silencio de tarde de domingo,
 de magnolias dormidas
y de esperanzas locas.

Solo el recuerdo de blancuras blancas
para calmar mi  sed de tierra seca
y serenar  en  mi pecho los ardores
del último Poema que escribiera,
nacido del aroma
de una magnolia blanca  enamorada.

Es silencio de tarde de domingo
y de recuerdo de blancuras blancas.-



OSCAR WILDE



Luz de soles tu frente
y delante, agazapada  en su mutismo
la pena esperando.

Jamás  a alma alguna
crucifico el amor, con clavos
mas rojos y encendidos.

A tanta fiel entrega
 ingratitud.
A tanta gran belleza
la miseria humana
con toda su negrura y su neblina.

El amor te ofreció  solo dolor
y el dolor, el postrer canto del alma.
No fue Reading tu tumba
sino tu copa de amargura.

Narciso ahogado, en el espejo de las aguas,
no fue más bello que tú,
desmayado sobre el recuerdo último
del lirio encendido
de tu trágico amor.

NOSTALGIA NOCTURNA


En las horas sin fe y sin esperanza
 y en los momentos de acallar el alma,
se confunden  jazmines y cometas.

 Embriaguez  en mi cielo y mi aposento,
vuelos nocturnos y aroma de jazmines.

Hay un raro misterio, las paredes
no reflejan la luz, solo  las sombras.

Sombras sobre sombras.

Al pensamiento lo azucaran los recuerdos
y es un suspiro, la lámpara que vela.

Las voces nocturnales se hacen música,
extraviada vuela una luciérnaga
y a través del cristal de la ventana
se perfila una noche de lánguida ternura.

Sobre sombras, camina la nostalgia.

ESTADIOS DE HERMOSURA



Las hermosuras, están en los celestes mundos,
en el rayo lunar y en el dorado sol cuando declina.

Están las hermosuras en lo alto de los montes
donde el águila sueña y espera su destino.
En los  abismos donde ruge el trueno
y en los blancos cabellos de la ola.

Están en la mirada, cristales de misterio,
en las manos que tiemblan en la entrega,
en los colores que tiene la ternura,
en la caricia, en el perdón y el beso.

Están en el amor  cuando se entrega
con la trasparencia de la lluvia,
con el fuego que tienen los volcanes
y con la sencillez del carbonero.

 Están  también…en el instante fúlgido
si sientes el amor entre las manos.

BELLEZA DE TRISTEZA


Que triste es la belleza
cuando se viste de nostalgia.
Pálida y  trasparente
tiene  color de magnolia enamorada.

Que triste es la belleza
y que bella la tristeza,
cuando uno es el sentimiento,
y uno  sólo el  ideal
que entre ambas vibra.
.
Tristeza y belleza
en los arcanos del alma.
En la intimidad del poema
y en los fuegos fatuos
 que persigue el Poeta.

Que triste la belleza
y que bella la tristeza.

PRESAGIO



La ausencia se fuga
por el cristal de la ventana,

Globos e ilusiones
se roban mis espacios

y una lejana tonada
viaja en las horas.

Tu voz es un presagio,
se aleja la ausencia,
se ilumina el recuerdo,

Y crecen en mis manos
canciones y poemas.

CALIDOSCOPIO MUDO


A veces recordando tu mirada
me extravío en un laberinto
de inquietantes colores.

Entre el verde malva
y el profundo verde,
los infinitos cristales
de un calidoscopio centellean.

Cascabeles de colores
y prismas de sonidos
atrapan el misterio del verde malva
y del profundo verde…

A veces recordando tu mirada,
me extravió en abismos misteriosos,
de realidades y de ensueños
de risas y de lágrimas.

Un vuelo se perfila
y se estremece el alma,
al paso trasparente del recuerdo
sobre el calidoscopio de tus ojos.